Imagen: RTVE

La Plaza de las Galeras en Cádiz debe su nombre al hecho de que durante siglos fue el lugar donde se ubicaba el astillero de galeras de la ciudad. Las galeras eran embarcaciones de guerra propulsadas por remos que se utilizaron ampliamente en la Edad Media y la Edad Moderna. Eran barcos de guerra ágiles y maniobrables que desempeñaron un papel importante en la defensa de las costas y en las operaciones navales de la época.

La importancia de esta fuente radicaba en que, antes de partir hacia América, la Flota de Indias se abastecía de agua fresca y potable en la ciudad de Cádiz. Este recurso era imprescindible para asegurar la hidratación de la tripulación y los pasajeros a lo largo de los largos viajes que atravesaban el océano. Así, la fuente se ganó su nombre característico debido a su papel fundamental en el abastecimiento de agua para la Flota de Indias, contribuyendo a la navegación exitosa y a la supervivencia de quienes emprendían estos viajes marítimos históricos.

Imagen: Guía de Cádiz

La necesidad de un muelle acorde con un puerto en el que invernaban las galeras reales se planteó por vez primera en 1568, durante la estancia en nuestra ciudad de D. Juan de Austria.

En lo que se refiere a la construcción de una capilla destinada el servicio religioso de las galeras, fue D. Luis de Requesens y Zúñiga, a la sazón lugarteniente general de don Juan de Austria y fundador de la Cofradía de Galeras de Nuestra Señora de la Piedad y Caridad, quien levantó en la marina en los últimos años del siglo XVI un oratorio donde se celebrase la misa los días festivos y fuese asiento de la hermandad creada por oficiales y gente de galeras para “alivio de enfermos y decente enterramiento de difuntos”.

 

Imagen: Betilo (Asociación de Defensa del Patrimonio Histórico de El Puerto de Santa María)

Con el traslado en 1668 de las galeras reales al puerto de Cartagena, debido entre otras cuestiones a la dificultad para la navegación ocasionada por la acumulación de arena en la desembocadura del río, la capilla perdió el cometido que tuvo en origen, pero se mantuvo con cierto culto, siempre vinculado con la Armada.

Imagen: Betilo (Asociación de Defensa del Patrimonio Histórico de El Puerto de Santa María)

Bajo el reinado de Felipe V, la fuente de Las Galeras se construyó en el año 1735, y con ella se puso punto final a las obras de reforma de la conducción de aguas del siglo XVII y a la edificación de un nuevo acueducto subterráneo y una cañería. Además del abastecimiento a la población, la fuente tenía la función de aprovisionar a barcos mercantes y de guerra y suministrar agua a Cádiz. Originariamente tenía otros seis caños por la cara que da al río, por donde se efectuaban las aguadas a las embarcaciones. El remate decorativo y conmemorativo, enmarcado por roleos vegetales (cardos), contiene una placa flanqueada por dos leones rampantes coronados, y está culminado por el escudo de armas de Felipe V, timbrado por una corona real a modo de dosel. Cabe mencionar que la traída de las aguas de la Piedad fue la obra pública más importante realizada en El Puerto y la zona en la primera mitad del siglo XVIII.

 

(Fuente: Betilo,  Asociación independiente y sin ánimo de lucro para la defensa, conservación y difusión del Patrimonio Histórico de El Puerto de Santa María.)

 

Imagen de Archivo de BETILO 

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