Año 1712, frente a las costas de Lisboa, Amaro Pargo asaltaba el navío inglés procedente de Cádiz, y con destino a Dublín, llamado el Saint Joseph (San José), de origen francés pero rebautizado en Dublín. Este asalto,  hasta ahora, es el mejor documentado que se haya encontrado en los archivos históricos en España .

Amaro capitaneaba Nuestra Señora de la Candelaria y regresaba de Venezuela, realizando una vez más uno de sus viajes transoceánicos, llevando una tripulación mayoritariamente canaria. Alexander Webster era quien capitaneaba el Saint Joseph, un barco de pequeñas dimensiones, y que se dedicaba al comercio de abadejo, vino, pasas, aceite de oliva, corcho (lo usaban para taponar las botellas en Inglaterra), limones y naranjas.

Cual fue la sorpresa de la tripulación inglesa, que cuando le solicitaron la patente de Corso a Amaro, y así corroborar si tenía derechos para detenerlos en nombre del Rey, y de España, Amaro no la llevaba encima. En teoría la había recibido años antes por el Gobernador de Venezuela, pero ese día lo pillaron sin su patente. ¿Se le quedaría en la mesilla de noche de alguna de sus tantas casas en La Laguna, antes de partir hacia la Guaira, y no recordaba en cual la dejó? O simplemente, ¿no se la quiso mostrar?. O …, ¿no era corso en aquel momento?.

Comparto extracto de un manuscrito encontrado en el Archivo Militar de Segovia (el Legajo 378, exp.3778). Alonso de la Lama y Noriega representaba a Alexander Webster durante el juicio para confirmar si fue buena o mala la presa. Finalmente se declaró la presa mala, y tras trasladarlos a Tenerife, tuvieron que entregarles el navío a sus propietarios y estos pudieron regresar a Irlanda. Los documentos del archivo acreditan igualmente, que el Rey Felipe V, ordenaba su liberación inmediata, a diferencia de varias opiniones que indican que se lo apropió por falta de navíos en la Armada Española.

…Y porque sin perjuizio de la dicha nulidad, la injustizia del auto en que declaró por buena la dicha presa es manifiesta: lo primero, porque el dicho capitán don Amaro no tenía la patente y despacho sufiziente; lo segundo, porque la presa la hizo fuera de los límites de su nauegazión; lo terzero, porque usó de arte y cautela …

Sentencia del 25 de Septiembre de 1712 (Felipe V).

El Rey

Por quanto he venido en que a don Juan Carrol se le dé pasaporte para que el nauío ynglés nombrado el San Joseph, de porte de cinqüenta toneladas poco más o menos, su capitán Alexandro Webster pueda venir de Ynglaterra al puerto de Cádiz con géneros y mercaderías,aunque sean de ilízito comerzio, pagando los derechos establezidos según su calidad, sacando en retorno frutos y géneros de la tierra y sin la prezisión de traer granos que han tenido otros nauíos.

Por tanto, mando a qualesquier juezes del Contrauando, gouernadores, corregidores alcaldes y capitanes del corso, ante quienes se presentare este passaporte, atiendan a su efectiuo cumplimiento sin ocasionar molestia alguna al dicho nauío y capitán; que tal es mi uoluntad.

Y que se tome razón en la veeduría del Contrauando del referido puerto de Cádiz, al tiempo de la entrada y vuelta de dicho nauío, atendiendo con la maior vijilanzia a que a este pretesto no se introduzgan mercaderías y géneros de los dominios de Olanda.

Dado en Corella, veinte y zinco de septiembre de mil setezientos y do[ce].

Yo el Rey,